Primeras impresiones de Filipinas

Tomamos el vuelo desde Christchurch hacia Sydney con JetStar, en Sydney hacia Kuala Lumpur con Air Asia, que vuelo más largo, 9 horas!, ya no dábamos más, estábamos muy cansados por el no descanso de los días anteriores, el dormir poco y el horario cambiado, vivimos el día 17 de noviembre en 4 países distintos casi, si no es por la media hora que llegamos tarde a Manila.

Primera vez que ocupaba Air Asia, la tripulación desde Sydney a Kuala Lumpur, tiene que haber sido malaya, la que iba a Manila, filipina, bien bonitas las filipinas y amables, en ambos vuelos nos pudimos cambiar de asientos porque estábamos separados.

Llegamos a Manila con un calor húmedo de esos que me recuperaron porque adentro del avión estaba heladísimo, inmediatamente sentimos la amabilidad de los filipinos (en el avión ya lo habíamos comprobado), el Seba que estaba medio durmiendo aún, se le quedó una mochila con su computador y otras cosas antes de policía y fue un guardia a buscarnos preguntándonos si era de nosotros…, cuando ya salimos al calor de la ciudad, nos dirijimos al terminal para supuestamente irnos a Puerto Princesa, pero el Seba preguntó a un guardia por si sabía cual era la aerolínea más barata para irse y nos llevó a una agencia…, una agencia abierta a esta hora dijimos!?, eran las 1am, bueno vamos, nos acompañó al frente y efectivamente estaba abierta una “agencia” que no tenía pinta de agencia, nos vio los pasajes más baratos para ese mismo día más tarde durante la mañana y nos quería cobrar $10.000 php entre los 2, demasiado caro, en N.Z. los había visto por internet a 1.040 pesos o quizás un poco más, los debería haber comprado ahí, pero me mandaba a una página para pagar que se llamaba dragon algo que no me daba confianza y ahí mismo nos podían cambiar los NZD, el cambio era de 200nzd nos daban 6000 pesos, estaba a 30 pesos el cambio, pero no me tincó nada, además que no podíamos gastar tanta plata, ya que andábamos en el plan de ahorrar, así que les dijimos que muchas gracias y nos volvimos al aeropuerto a pensar mejor, aunque no lo podíamos hacer mucho ya que moríamos de sueño, dormíamos a rato afuera del aeropuerto, esperando que amaneciera para irnos a algún hostal, así que a eso de las 6, tomamos un taxi y nos fuimos al hostal que había dejado anotado antes de irme de N.Z., el taxista nos vio un poco la cara y como no sabíamos mucho de precios, terminamos pagando 250 pesos hasta el hostal, que estaba a unos 20 minutos del aeropuerto, que son unos 3.300clp, en Chile se pagaría muchísimo más, por lo menos en Concepción, pero estamos en Filipinas.

Finalmente llegamos al hostal, Wanderers guesthouse, muy amables desde el principio, nos entregaron inmediatamente la pieza y era tempranísimo, alrededor de las 7am o menos.

Luego de un merecido descanso fuimos a dar una vuelta para conocer el barrio, bastante comida callejera, varios gallos, que después supe que eran para peleas clandestinas, hartos gatos desnutridos y perros también, mucha gente pobre y humilde, llegamos a un mercado local, muchas frutas y carne sin refrigerar, compramos mangos, piña y papaya.

Al día siguiente fuimos a caminar por el paseo a orilla del mar, niños pequeños te siguen por largo rato pidiéndote dinero.

 

Esto fue camino al aeropuerto.

Antes de irnos de Manila visitamos Intramuros, la ciudad amurallada que quedó de cuando los españoles la conquistaron, si, la ocupó un poco menos de 300 años y la llamaron Filipinas en honor al Rey Felipe, más tarde descubriríamos las muchas palabras que tenemos en común con ellos, longaniza, tenedor, mesa, pantalón, cuchara, hospital,pensión, todos los números, días de semana, meses y así, un largo etc; construcciones grandes y antiguas quedaron de esa época, bien bonitas, aunque uno caminaba de repente a cualquier calle y la realidad de Filipinas te golpeaba la cara otra vez, lleno de gente pobre, niños bañándose con baldes en las calles, etc.

Hasta Intramuros nos fuimos caminando, quedaba a unos 25 minutos de nuestro hostel, queríamos ir a Chinatown después pero no nos pareció muy seguro, además con el calor que hacía nos queríamos devolver ya, de vuelta tomamos por primera vez un jeepneys, muy baratos $8, acá no hay micros, sólo se ocupa esto.

 

 Jeepneys

 Intramuros

Peluquero en las calles de Intramuros

     Y fuera de Intramuros, un campo de golf…

  Por las calles de Manila

Al día siguiente nos esperaba otro vuelo, ahora hacia la isla de Palawan, probando otra línea aérea, Philippine Airlines.

Chao Manila, Hola Palawan!

Nosotros nos queríamos ir en los exóticos jeepneys al aeropuerto, pero después supimos que el terminal 3, distinto al que llegamos, quedaba lejos y más retirado de la ciudad, así que tuvimos que tomar un taxi, los dos primeros no los tomamos, el primero nos pedía demasiado, $350 y el segundo dijo que no porque había demasiado tráfico, el tercero nos llevó x $200, el tramo no es largo pero hay demasiado taco por lo que si, se demora un poco, de nuevo a travesando la ciudad, pobreza por todos lados, el tráfico es de locos, no podría ser chofer acá.

El vuelo a Puerto Princesa estaba atrasado, pfff, por lo que llegamos de noche a la ciudad, nos fuimos en un triciclo por 60 pesos a ver 2 hostales, que acá se llaman pensiones, que él nos ofrecía, nos quedamos finalmente en Duchess Pension.

Puerto Princesa es un poco menos caluroso que Manila a veces, pero más húmedo, nada agradable, así que nuestras vueltas no eran muy largas, la mejor hora era la que yo despertaba como a las 6 de la mañana, ya el calor no me dejaba seguir durmiendo y afuera estaba algo más fresco, además que todo empieza temprano a funcionar, debe ser por el calor.

Esa noche conocimos las lluvias tropicales, estábamos comiendo dentro de un local y salimos, sin darnos cuenta que estaba lloviendo muy fuerte, en el cruzar de la calle quedamos muy mojados, así que nos cobijamos bajo un techo esperando que pasara un poco la lluvia, durante la noche siguió la lluvia torrencial.

 

 

      Mercado y alrededores.

  El día que nos agarro la lluvia torrencial dentro del mercado, menos mal.

               ¿¡Huevos fucsias!?, si!, los sumergen en agua con sal. El color, para diferenciarlos.

       El Seba también aprovechó de acicalarse.

La señora mira atenta las maniobras del peluquero.

Mi desayuno fue tuyo, los filipinos suelen desayunar arroz con pescado u otra cosa, tuyo es arroz blanco sin sal, pescados pequeños muy salados y huevo frito, eso por 100 en la pensión. El Seba se pidió unos pancakes, que después repitió porque es el Seba…

        Tuyo a 100 pesos, un poco más de 1300 clp.

Salimos a medio día a comprar algunas cosas y fue la peor idea, quizás la mejor hora para salir sea muy temprano en la mañana o después de las 4pm, cuando no hace tanto calor, más tarde visitamos el mercado local, me encantan los mercados, llenos de verduras, frutas, carnes no refrigeradas y pescados!, lo primero que vimos, muy frescos, parecían recién pescados, en medio de nuestro recorrido se largo a llover torrencial, tan fuerte, nunca había visto llover así, así que nos quedamos ahí hasta que pasó, aprovechamos de comprar nuestra once, mangos y bananas, que ricooo!, más tarde me enteraría que esos mini plátanos eran una mezcla de sabor con tuna, muy ricos.

Hoy gasté en el desayuno 100, en el almuerzo 95 y la once 65, varias mini bananas, 1 mango y 2 dulces típicos de esos que venden en la calle.

Y ya teníamos que apretarnos el pantalón (una palabra en común que tenemos con los filipinos), así que nuestro presupuesto está muy reducido.

Vamos a ver cuanto nos duraría.